Presidenciables o cuando la falta de pudor inunda la política
Se supone que el país ingresará a un proceso constituyente que definirá su futuro. Al parecer, todos estarían de acuerdo en que debe contar con una alta participación del pueblo, en el que radica la soberanía. Pero, la realidad muestra que para la elite que todavía domina el escenario político, aquello no está en sus cálculos y que poco le interesa la soberanía popular ni el bienestar de las personas. Así, se desató una campaña por la presidencia de la república, en la que brotan de la nada las y los postulantes dispuestos a “sacrificarse”, pero son las y los mismos de siempre, que en medio de una desmovilización generalizada, aprovechan la cobertura mediática y desatan sus ambiciones. Todos y todas han participado en negociados políticos o fueron adherentes de gobiernos pasados, pero ahí están, con gran descaro y con cero autocrítica, pregonan que ahora escucharán al pueblo. Nada más les importa, solo están pensando en ellos o ellas. Habrá que tener paciencia.