Paro de camioneros, entre la patota y el ridículo

La ciudadanía no entiende lo que solicitan los camioneros, solo ha visto que reclaman por los atentados en el sur, pero el petitorio en sí, muy pocos lo conocen. Quieren demostrar la fuerza que poseen y que el resto de la población sepa que son un gremio aguerrido. Se involucraron con la intención de influir en un conflicto que tiene siglos de antigüedad.
Pero no tienen la capacidad ni la calidad para influir en una situación altamente compleja. Así, solo son usados como fuerza de choque por quienes efectivamente pueden lograr un acuerdo, pero se niegan porque la verdad histórica los desfavorece. Algún momento la paralización terminará y los beneficios que alcanzarán serán modestos. El conflicto en la Araucanía solo tiene una salida política y el gobierno aún no alcanza a percibirlo.