Sucia utilización del flujo de migrantes para justificar ineficacia y proyecto de ley xenófobo
La senadora Luz Ebensperger, con un tono fascistoide, indicó que en Tarapacá, la restricción se ha mantenido por la llegada de migrantes. Coincidió con el canciller Allamand, en que la migración ilegal aumentará por las indicaciones de la oposición al proyecto de ley que se discute en el Congreso, las que flexibilizarían ciertas opciones de ingreso al país.
El absurdo argumento, busca desviar hacia los migrantes la causa de la incapacidad del gobierno para enfrentar la epidemia y, a la vez, incentiva una burda xenofobia, debido a que los habitantes de la región están sumamente sensibles por el traslado de 600 migrantes desde Providencia que llegaron sin examen PCR y varios de ellos contagiados por Covid-19.
Justo en momentos en que el gobierno ve como un peligro económico la migración, se desata este extraño alto flujo en la frontera y se despiertan sentimientos escabrosos en una población saturada con una extensa cuarentena y con parte del comercio afectado duramente. Hace un año y medio, Piñera incentivaba el éxodo como medida política contra Maduro, pero hoy los venezolanos son un estorbo. Una torpe y oscura maniobra.